Desarrollada por la NASA, la innovadora máquina no solo purifica el aire, pasando por el catalizador, sino que también difunde una densa red de moléculas (ROS - Reactive Oxygen Species), que desinfecta todas las superficies y el medio ambiente.
De hecho, gracias a una nueva tecnología (AHMPP) combinada con la acción de los oxidantes, la luz y la humedad del aire, el dispositivo activa la descomposición de sustancias orgánicas e inorgánicas nocivas, reteniendo solo las moléculas de oxígeno e hidrógeno.
Un fenómeno absolutamente natural, similar al que ocurre durante una tormenta, que lleva hidratada la oxidación catalizada avanzada al lugar de trabajo y al hogar.
Los oxidantes producidos por el sistema AHMPP también son mortales para los virus, pero no dañan a las personas ni a las mascotas porque no son tóxicos.
Esta tecnología, basada en la introducción de partículas perturbadoras en el aire, también es "verde", ya que permite un importante ahorro energético, sin mantenimiento rutinario.